Mestiza || Reseña

Título Original: Half-Blood
Saga: Covenant ‹#1›

Autor: Jennifer L. Armentrout

Editorial: Ediciones Kiwi

Páginas: 350

Precio: 17.90€

Encuadernación: Tapa blanda

Los Hematoi provienen de la unión entre dioses y mortales; y los hijos de dos Hematois de sangre pura tienen poderes divinos. En cambio, los hijos de Hematois y mortales, no. Los mestizos solo tienen dos opciones: entrenar para ser centinelas, cazando y matando Daimons, o convertirse en sirvientes en las casas de los puros. Alexandria prefiere arriesgar su vida luchando antes que limpiar retretes, aunque de todas formas, puede que termine en los barrios bajos.
Hay reglas muy estrictas que los estudiantes del Covenant deben seguir. Álex tiene problemas con todas, pero especialmente con la regla número 1:
«Las relaciones entre pura sangre y mestizos están prohibidas».
Por desgracia, Álex se siente atraída por Aiden, un pura sangre irresistible. Aunque enamorarse de Aiden no es su mayor problema; mantenerse viva hasta su graduación en el Covenant y llegar a ser centinela sí lo es. Si no cumple con su deber, se enfrentará a un futuro peor que la muerte o la esclavitud: se convertirá en un Daimon y Aiden será su cazador. Y eso, no es nada bueno.

Hoy os traigo un libro que hacía mucho (muchísimo) que quería leer pero como lo quería en físico, me resistía. Pero... He caído. Se trata del primer libro de la saga Covenant, escrito por la maravillosa Jennifer L. Armentrout. Empece a leer este libro porque bueno, ¡Es un libro de Jennifer! Solo por eso ya tiene que ser bueno sí o sí. Y es que, tras la saga Lux, sentía que debía leer algo más sobre esta autora. Así que empecé su otra saga (otra de tantas de las que tiene ella). Ni leí la sinopsis ni nada. Solo empecé.

Puede que si hubiera leído la sinopsis hubiera dejado este libro para más adelante. O no. ¿Quién sabe? En cuanto empecé Mestiza, solo podía pensar en una cosa: esto es Vampire Academy 2.0. Me desesperaba. 

Pero menos mal que esa sensación solo duró unos pocos capítulos, porque sino no me hubiera gustado tanto como lo ha hecho.

No me mal interpretéis, Vampire Academy es una de las mejores sagas que he leído pero no sé, no esperaba que fuera tan igual.

No voy ha hablar más sobre las similitudes porque odio comparar libros así que... Continuamos.

¡Adoro la manera que tiene Jennifer de escribir! Me encanta. Me encanta. Este libro me enganchó desde el primer momento. No os voy a engañas, este libro ha sido uno de los mejores que he leído este año. Y si digo que es fantástico lo digo con mayúsculas. Es un libro muy bonito y que se lee muy rápido. Me he encariñado con todos los personajes (incluso con los que hacen la vida imposible a nuestra testaruda protagonista). Desde el primer momento este libro te atrapa y no te deja ir. Ni siquiera cuando lo acabas; empezar el siguiente es una necesidad. Y es que, con este libro he reído, he llorado y he sufrido. Mestiza es acción con un toque cómico.

Lo que más me gusta de estos libros es que cita a otros libros o autores (a Harry Potter, Los Juegos Del Hambre, Hush Hush), a series (por ejemplo a Supernatural) e incluso nombra a sus libros entre si.

La sociedad en la que viven es realmente injusta. Veréis: existen dos clases de individuos: los Puros y los Mestizos. Los puros son los únicos que importa, su vida está por encima de la de los mestizos, la cual no tiene ningún valor. Eso es debido a la decisión de los Dioses. O al menos así lo inculcan desde pequeños. 

Los puros pueden tener grandes expectativas en la vida. Tras graduarse, pueden convertirse en lo que les plazca. Los puros más influyentes pasan a ser miembros del Consejo, lo que les da una vida de grandes éxitos. Por lo tanto, los únicos que pueden ser parte del Consejo son ellos. Los mestizos, por otra parte, no tienen tanta suerte. Ellos solo tienen dos opciones: o dedicarse a la servidumbre a los puros (y en ese momento pierden cualquier posibilidad de ser libre... entre otras cosas porque los drogan y pasan a convertirse en esclavos, básicamente), o pasan el resto de sus días arriesgando su vida protegiendo a los puros como guardias o cazando daimos —Centinelas —. Por eso, es raro que un puro haya elegido dedicarse a pelear ni a defender. Es más, a la hora de juzgar por algún delito por muy mínimo que sea, los que son severamente castigados son los mestizos, incluso aunque ellos sean las víctimas. Horrible, ¿verdad?

No nos olvidemos que la relación entre puros y mestizos está totalmente fuera de lugar. Si se descubre que se ha llevado a cabo, el mestizo pasa directamente a convertirse en un sirviente más. Así lo dice la ley (ley regida por puros).

Este sistema me parece totalmente injusto e inapropiado. Sobre todo porque los puros necesitan a los mestizos porque son ellos los que dan la vida por los puros. 

Lo peor de todo es que nadie parece darse cuenta de la injusticia que estas leyes suponen. Todo el mundo lo acepta como algo normal y nadie se rebela ante ellas. Al menos la principio. Por eso adore cuando surge un sentimiento de querer cambiar las cosas (¡oh, por fin! ¡Gracias a los dioses!): que esos dos tipos de personas puedan tener una relación sin ser reprimidos por ello, que los mestizos puedan participar en el Consejo,... Aparece una idea de igualdad para ambos, un intento de renovar las leyes y nace una nueva mentalidad. 

¡Bien! ¡Por fin alguien se da cuenta de que esto tiene que cambiar! ¡No están todos ciegos!

Desde el primer momento sentí un profundo respeto hacia Aiden. El chico es un puro pero, tras la perdida de sus padres, decidió que él no formaría parte del Consejo, sino que se convertiría en un Centinela. Como ya he dicho antes, eso es algo inusual por parte de los puros, ya que ellos prefieren la vida "fácil". Aiden es diferente también porque él es de esos pocos puros que ve a todos —mestizos y puros — por igual. Y es partidario de que las normas impuestas son anticuadas y deben ser cambiadas. Y ese carácter suyo se profundiza cuando se enamora de una mestiza, Alex.

¿Que si he llorado con este libro? Mucho. Por ejemplo en el funeral. Se ve el gran cambio que ha dado Alex y lo mucho que ha madurado. La despedida fue tan triste... Empezando por el hecho que solo asistieron dos personas a parte de Alex y que fue algo simple pero oh, tan significativo. Nada comparado con todo el excentricismo en el de los puros, con toda esa ceremonia y esas cosas. Fue tan hermoso... Se veía claramente quien está ahí para ella a pesar de todo. Y me refiero a Caleb. A pesar de todo lo que las personas a las que rinden homenaje le han hecho, él asiste a la pequeña ceremonia.

Otro momento que adoré pero que fue devastador fue cuando Alex se da cuenta de que su madre se ha ido. El daimon ya no es ella y Lexie por fin se decide a pelear hasta su último aliento, a pesar de todo el dolor que ella siente tras haber sido drenada por horas. Ya no es la necesidad desesperada de venganza ni de ver a su madre de nuevo.

También es importante mencionar el momento en el que Alex y Seth tienen algo en común. Alex por primera vez ve a Seth cuando este entra con los demás guardias e inmediatamente ella ve en el unos tatuajes muy extraños. Como nadie más lo ha visto decide ignorarlo pero luego surge la conexión y nace el cordón azul... Seth le cuenta a Alex toda la historia de los Apollyon (como ellos fueron creados y porqué fueron destruidos), como los Apollyons se necesitan entre ellos como fuente de alimentación: tienen que estar conectados y le enseña que este puede controlas los cuatro elementos — aire, agua, fuego y tierra — además de un quinto pero raro elemento: akasha (que es básicamente como un rayo de energía). Lo que más me fusta es que 1) la abuela Piperi se lo dijo desde el principio a pesar de que 2) no hay quién la entienda pero de todos modos 3) Alex no se esfuerza en escucharla ni 4) se da cuenta de nada.

Enfin, algunas veces me dan ganas de estrangular a Alex...

Bueno, podría estar todo el día hablando sobre momentos perfectos a lo largo de este libro, pero prefiero que los leáis vosotros mismos.

Os recomiendo muy sinceramente este libro (caray, toda la saga). Realmente vale la pena, por mucho que otros piensen lo contrario. No me había reído tanto con un libro desde... bueno, no lo recuerdo. El descaro de los personajes de esta saga me encanta: el de Alex o el de Caleb. La manera que tiene Jen se contar sus historias es genial... Por eso, la nota que le voy a dar a Mestiza es de...

¿Os habéis leído la saga Covenant? ¿Alguno de los libros? ¿Qué os han parecido? ¿Y los demás libros de Jennifer? ¡Contadnos!